Kosher: ¡Todo lo que necesitas saber!
…..Y nadie se atrevió a preguntar
¿Qué animales son kosher? ¿Cómo debe ser preparada la comida kosher? Y antes que nada, ¿por qué hay que comer kosher?
¿Qué animales son kosher? ¿Cómo debe ser preparada la comida kosher? Y antes que nada, ¿por qué hay que comer kosher?
Todo el que
estuvo en ciudades con comunidades judías importantes, probablemente ha
disfrutado de perros calientes kosher, falafel kosher, o embutidos kosher.
Entonces, ¿Qué hay detrás de esta deliciosa comida?
La palabra
hebrea “kosher” significa literalmente “preparado”. Los alimentos que son
permitidos por la Torá y preparados de acuerdo a la ley judía son kosher. En
esta lección, daremos un vistazo general a lo que hace que la comida sea
“kosher”, y al final examinaremos algunas de las bases filosóficas del concepto
kosher.
Especies kosher
1. Animales
La Torá
(Levítico 11:3) establece las características de los animales permitidos como
aquellos que tienen pezuñas completamente partidas y que además son rumiantes.
Los animales kosher son siempre mamíferos y herbívoros. Los animales kosher
comidos comúnmente hoy en día son la vaca, la cabra y la oveja – y a veces el
ciervo y el búfalo.
2. Aves
La Torá enumera
24 especies prohibidas de aves, y el Talmud explica que, entre otras señales,
todas las aves de rapiña (buitre, halcón, águila) están prohibidas. En la
práctica hoy en día, sólo comemos aquellas aves que tienen una tradición
establecida de que son kosher – por ejemplo pollo, pavo, pato y ganso.
Con respecto a
los “huevos kosher”, deben venir de especies de aves kosher (por ejemplo
gallina).
3. Pescado
La Torá
(Levítico 11:9) enseña que un pescado kosher debe poseer tanto aletas como
escamas (las aletas ayudan al pescado a nadar, y las escamas son una cobertura
del cuerpo). Incluso si el pescado tiene una sola escama o aleta, es permitido.
El atún, por ejemplo, tiene muy pocas escamas, y sin embargo es kosher. Otros
pescados kosher populares son la lubina, la carpa, la merluza, el lenguado, el
arenque, la caballa, la trucha y el salmón.
Los crustáceos
(como la langosta y el cangrejo) y otros tipos de mariscos (como las almejas)
no son kosher, porque no tienen escamas. Además, todos los mamíferos acuáticos
(como las ballenas y los delfines) no son kosher.
Y sí, hay
variedades kosher de sushi y de caviar – siempre y cuando estén hechos con
especies kosher y con utensilios kosher (cuchillo, tabla de picar, etc.).
4. Insectos
Muchos se
sorprenden al descubrir que cuatro especies de saltamontes son kosher (Levítico
11:22). Sin embargo, todos los otros insectos no son kosher. Uno podría pensar
que ésto tiene poca aplicación práctica de acuerdo a nuestros hábitos
alimenticios modernos. Pero en realidad, muchos vegetales de hoja (lechuga,
brócoli) a menudo contienen insectos y deben ser cuidadosamente examinados antes
de poder ser ingeridos. Algunas frutas como las frambuesas y las frutillas
también pueden ser problemáticas. Los rabinos han desarrollado métodos
específicos para revisar adecuadamente estas frutas y vegetales.
Matanza kosher
1. Shejitá
Además de
pertenecer a una especie de animal kosher, la carne kosher requiere que el
animal/ave sea matada de acuerdo a la manera ordenada por la Torá (Shejitá)
(Los pescados no tienen este requerimiento). En este procedimiento, un matador
kosher entrenado (shojet) corta la tráquea y el esófago del animal con
un cuchillo especial muy afilado. Esto también corta la vena yugular, causando
una muerte casi instantánea con mínimo dolor para el animal.
2. Bediká
Después de que
el animal/ave ha sido matado adecuadamente, sus órganos internos son
inspeccionados por cualquier anomalía fisiológica que pueda convertir al animal
en no kosher (taref). Los pulmones, en particular, deben ser examinados
para determinar que no haya adhesiones (sirjot) que puedan ser
indicativas de una perforación en los pulmones.
3. Nikur
Los animales
contienen muchas venas (por ejemplo el Guid HaNashé) y grasas (jélev)
que están prohibidas por la Torá y deben ser removidas. El procedimiento de
remoción es llamado “Nikur”, y es bastante complejo. En la práctica, hoy en
día, el cuarto trasero de la mayoría de los animales kosher es simplemente
removido y vendido como carne no kosher.
4. Salado
La Torá prohíbe
comer la sangre de un animal o de un ave (Levítico 7:26); el pescado no tiene
este requerimiento. Entonces, para extraer la sangre, toda la superficie de la
carne debe ser cubierta con sal gruesa. La carne debe ser kosherizada dentro de
las 72 horas posteriores a la matanza para no permitir que la sangre coagule
(Una forma alternativa de remover la sangre es asándola en una parrilla
perforada sobre un fuego directo).
Prohibiciones
adicionales
1. Carne y
Leche
La Torá prohíbe
comer carne y leche combinadamente, y hasta prohíbe el acto de cocinarlas
juntas (al igual que derivar beneficio de esa mezcla). Como protección, los
Sabios prohibieron comer productos de carne y lácteos en la misma comida, o
prepararlos con los mismos utensilios. Por lo tanto, una cocina kosher debe
tener dos juegos separados de cacerolas, sartenes, platos y cubiertos – uno
para carne/aves y el otro para lácteos.
Uno debe
esperar hasta seis horas después de comer un producto de carne antes de comer
productos lácteos. Sin embargo, la carne puede ser comida a continuación de los
productos lácteos (con la excepción del queso duro, que también requiere un
intervalo de seis horas). Antes de comer carne después de una comida láctea,
uno debe ingerir algún tipo de comida sólida y la boca debe ser enjuagada.
2. El Miembro
de un Animal Vivo
La Torá
(Deuteronomio 12:23) prohíbe comer un miembro que fue sacado de un animal antes
de ser matado. En hebreo, esto es llamado Ever Min HaJai (este
requerimiento es en realidad una de las Siete Leyes de Noaj que aplican también
a los no judíos).
3. Jalav Israel
Una ley
rabínica requiere que haya supervisión durante el proceso de extracción para
asegurar que la leche proviene de un animal kosher. En los Estados Unidos,
mucha gente confía en que las regulaciones y en los controles del Departamento
de Agricultura son lo suficientemente rigurosos para satisfacer el
requerimiento rabínico de supervisión. Sin embargo, mucha gente no confía en
ésto, y sólo come productos lácteos que son designados como Jalav Israel (literalmente,
“leche judía”).
4. Bishul Akum
Bishul Akum es un término hebreo que significa “cocinado por un no judío”. Como una
protección rabínica en contra de la asimilación, algunas comidas cocinadas por
un no judío son consideradas no kosher. Mientras que esta ley tiene muchos
detalles, la regla básica es que cualquier comida que: 1) no podría haber sido
comida cruda, y 2) es lo suficientemente importante como para ser servida en
una mesa lujosa, no puede ser comida si fue cocinada por un no judío.
Si un judío
ayuda encendiendo el fuego o cocinado, la comida puede ser comida hasta si fue
cocinada por un no judío (asumiendo que, por supuesto, la comida en sí misma
era kosher en todos los otros aspectos).
Productos
kosher
1. Granos
Para cumplir
con la cashrut, hay un asunto relacionado a los granos llamados Jadash y
Iashán – literalmente “nuevo” y “viejo”. La Torá (Levítico 23:14) dice
que si un grano (como el trigo) fue cosechado antes de Pesaj, no puede
ser comido hasta después de (el segundo día de) Pesaj.
Esto significa
que tenemos dos tipos de granos: los granos que no han celebrado su primer
Pesaj están (temporalmente) prohibidos por ser jadash, mientras que los
granos que han existido lo suficiente como para tener un Pesaj en su haber, son
iashán, y está permitido comerlos.
Otro asunto
relacionado a los granos es Jalá (no hay que confundirse con el pan
entrelazado que comemos en Shabat). Cuando uno amasa una cantidad significativa
de masa (más de 1,2 kg) para hornearla, una pequeña porción de la masa debe ser
removida y quemada (en los tiempos del Templo Sagrado, esta porción era
entregada al Cohén). Una vez que la jalá ha sido separada de la masa más
grande, la masa es “kosher” para ser horneada como pan u otros productos.
2. Frutos
Los frutos que
crecen durante los tres primeros años a partir de la plantación del árbol son llamados
Orlá y no son kosher para ser ingeridos. Esta ley aplica tanto a árboles
de Israel como de la Diáspora. Si plantas un árbol frutal en tu patio, no
puedes comer el fruto por tres años, y hay un procedimiento especial para hacer
que la fruta esté permitida para ser comida en el cuarto año (consultar con un
rabino).
3. Productos
Israelíes
Trumá y Maaser son términos para varios diezmos que aplican a los
productos de la tierra de Israel, para ser dados al cohén y al leví. Los
alimentos de los que no se ha separado el diezmo son llamados Tevel y no
son kosher para ser ingeridos. Si estás visitando Israel, o si estás comprando
naranjas o tomates israelíes en tu supermercado local, deberías asegurarte que
se han separado de todos los granos, frutas y vegetales los diezmos apropiados.
La Torá
(Levítico cap. 25) dice que cada siete años, el trabajo agrícola en la tierra
de Israel debe cesar. Esto es llamado Shemitá – el séptimo, año
sabático. Los productos que crecen en la tierra que fue “cultivada y trabajada”
durante el séptimo año no son kosher. Hoy en día, con el regreso de la
industria agrícola judía a Israel, las leyes relacionadas a Shemitá son
nuevamente muy relevantes. Entonces, si estás comprando productos israelíes,
asegúrate de que las leyes de Shemitá fueron observadas correctamente.
¿Por qué comer
kosher?
En el mundo
moderno en el que vivimos hoy, ¿Por qué deberíamos comer kosher?
Por supuesto,
la mejor respuesta a esta pregunta es “porque Dios dijo que lo hagamos”. Sin embargo,
además de esto hay beneficios prácticos y evidentes para comer kosher hoy en
día:
1)
Espiritualidad: La Torá enseña que la comida no kosher tiene un efecto negativo
en el alma humana. El alma es como la antena que recibe las ondas de energía
espiritual. Comer comida no kosher daña la capacidad del alma para “conectarse
espiritualmente”. Este daño puede ser reparado una vez que la persona comienza
nuevamente a comer kosher.
2) Crecimiento
Personal: Si una persona puede ser disciplinada en relación a lo que come,
significa que puede ser disciplinada también en otras áreas de la vida. La Kashrut
requiere que uno deba esperar entre carne y leche, y que no comamos ciertos
animales o combinaciones de comida (¡Hasta si tienes hambre!) Todo esto inculca
auto-disciplina, y nos permite elevar nuestro lado espiritual al tomar
decisiones conscientes en lugar de responder a nuestros impulsos animales.
3) Razones de
Salud: Con esta supervisión extra, la comida kosher es percibida como más sana
y más limpia. Después de la matanza, los animales son chequeados por abscesos
en sus pulmones u otros problemas de salud. La sangre – un vehículo para el
crecimiento de las bacterias - es drenada. Los mariscos, los moluscos, las
langostas y los cangrejos han difundido tifoidea y son una fuente para la
urticaria (una afección neurótica de la piel). La leche y la carne se digieren
en ritmos diferentes y son dificultosos para el organismo. Y, por supuesto, los
cerdos pueden transportar la triquinosis.
4) Lecciones
Morales: Se nos enseña a no ser crueles – incluso con los animales. Una madre y
su hijo tienen prohibido ser matados en el mismo día y, por supuesto, no
“hervimos a un cabrito en la leche de su madre”. No quitamos el miembro de un
animal mientras todavía está con vida (una práctica común, antes de la
refrigeración). Cuando matamos un animal, esto debe ser hecho con la menor
cantidad posible de dolor. Y, con la prohibición de comer aves de rapiña, se
nos recuerda no ser cruentos.
5) Tradición:
Una de las claves para hacer que un hogar judío sea “judío” es la observancia
de la Kashrut. Cuando mantenemos la Kashrut en nuestro hogar, nuestro apego al
judaísmo y a los sacrificios que hacemos se arraiga en las mentes de nuestros
niños para siempre. Y con la comida siendo tan a menudo el centro de los
eventos sociales, comer kosher nos provee una barrera interna en contra de la
asimilación. Para muchos, el punto de inflexión entre el pasado y el futuro es
el aroma espiritual de la cocina kosher.
Por
último, no podemos llegar a comprender toda la profundidad de “por qué comer
kosher”. Porque como dice el dicho: comer kosher es mucho más que deleitar el
paladar…