🕊️ Kashrut de productos derivados de animales: leche, huevos y miel
“כל היוצא מן הטמא טמא, והיוצא מן הטהור טהור”
“Todo lo que proviene de un ser impuro es impuro, y lo que proviene de un ser puro es puro.”
Este principio guía la halajá respecto a los productos derivados de
animales.
🥛 Leche
Solo la leche proveniente de mamíferos kosher (como vaca,
cabra u oveja) es considerada kosher.
- La leche
de animales no kosher (como camello o cerda) está prohibida, incluso si es
físicamente similar.
- Este
principio se aplica incluso si el animal no fue faenado, ya que la leche
no requiere shejitá.
- El tema de
la leche se amplía en dos áreas halájicas:
- Basar
Bejalav (carne y leche)
– prohibición de mezclar o cocinar juntos (Éxodo 23:19; Talmud, Julin
113a).
- Jalav
Israel – leche
supervisada por judíos desde el ordeñe, según el decreto rabínico
(Shulján Aruj, Yore Deá 115:1).
🥚 Huevos
Solo los huevos puestos por aves kosher (como gallina, pato
o ganso) son permitidos.
- Los huevos
de aves no kosher (como avestruz o águila) están prohibidos.
- Además,
los huevos deben ser examinados cuidadosamente antes de su uso para
verificar que no contengan puntos de sangre, lo cual los invalida.
- Fuente: Shulján
Aruj, Yore Deá 66:9 – si se encuentra sangre en la yema, se desecha
todo el huevo.
- Si la
sangre está en la clara y no indica fertilización, algunos poskim
permiten retirarla.
🍯 Miel
Aunque las abejas no son kosher, la miel que producen sí
lo es.
- El Talmud
(Bejorot 7b) pregunta por qué la miel es permitida si proviene de un
animal no kosher.
- Respuesta:
la miel no se considera un producto corporal del insecto, sino una
sustancia procesada externamente.
- El Shulján
Aruj, Yore Deá 81:8 confirma que la miel de abeja es kosher, siempre
que no esté mezclada con ingredientes prohibidos.
✨
Conclusión
La halajá distingue entre productos que son secreciones
naturales (como leche y huevos) y aquellos que son procesados
externamente (como la miel).
- Leche y
huevos deben
provenir de animales kosher y cumplir requisitos adicionales.
- La miel, aunque proviene de un insecto no kosher,
es permitida por su naturaleza externa y no digestiva.
Este principio talmúdico —“lo que proviene del puro es puro”—
refleja la profundidad de la halajá en preservar la santidad incluso en lo
cotidiano.
Rabino M.Ed. Rubén Najmanovich
Diciembre 2025 // Kislev 5786
